No Seas Como Sofía, Helena o Paula.

Te identificas con alguna?

Hay 3 tipos de mujeres que juran que están avanzando… hasta que sus finanzas les gritan lo contrario. Y lo más loco es que cada una cree que “solo está pasando por una etapa”.

Spoiler: no es una etapa. Es un patrón.

Cuando no ves el patrón, lo normalizas.
Y cuando lo normalizas, se vuelve identidad.
Y cuando se vuelve identidad… te quedas atrapada ahí por años sin darte cuenta.

Lo he visto tantas veces que ya tienen nombre en mi universo. Y sí… probablemente reconocerás a alguien. O peor: a ti misma.

1. Self-Last Sofía

Ella es la superhéroe sin capa… porque la usa para arropar a todo el mundo menos a ella.

Sofía está siempre en “modo salvavidas”: pareja, hijos, clientes, equipo, amigas, el perro, la suegra… todos reciben prioridad antes que ella.

Su herida inconsciente: “Ocuparme de mí primero es ser egoísta”.
Su realidad: Su turno nunca llega.

Resultado: desorden financiero crónico, constantemente enferma, y un círculo social tóxico porque su vida entera es apagar incendios ajenos.

2. Healing-Loop Helena

Helena es adorable. Dulce. Consciente.

Pero vive en terapia desde que WhatsApp era solo un bocadito verde.
Se emociona con cada libro, cada ritual de fuego, cada “descubrí una nueva herida”… pero cuando toca implementar estructuras, límites, números y decisiones: Ella responde con otro curso de sanación.

Avanza en conciencia. Retrocede en resultados.

Doy gracias a Helena por haberme llevado a la conclusión de una de mis frases más populares: “Necesitas Menos terapia y Más acción.”

3. Peak-Plateau Paula

Paula es intensa. Tiene mucho potencial.

Cuando colaboramos juntos su vida despega. Cobra más. Ahorra. Invierte. Avanza.
Hasta que le agarra el síndrome del “yo puedo sola” y corta el proceso “porque ya llegó a la cima”.

Tres meses después, vuelve a donde siempre: El plateau.

Una vez más se le salió todo de control, vuelve a no tener tiempo, sus números se desordenaron, y nuevamente está nublada en pensamiento y toma de decisiones. Muchas veces suele regresar al punto en el que estábamos cuando comenzamos a trabajar por primera vez.

Peca de ingenua al creer que ya lo tiene todo resuelto y que no necesita seguir retro-alimentando su mente y comportamiento semana a semana con las sesiones.

No las juzgo.

El punto es que todos tenemos un poco de Sofía, de Helena y de Paula.
El error es quedarte a vivir ahí.

Porque estas versiones tuyas están operando sin visión, sin estrategia y sin orden ni estructura.

Cuando cortas esos patrones, tu crecimiento deja de ser un accidente… y se convierte en un sistema.

¿Lista para salir del personaje que te está frenando?

Sálvate Primero.

VHMU.